Proyecto Atalaya

Jesús de la Rosa

Sevilla, 1948 – Burgos, 1983

La cima del rock andaluz

Músico, cantante y compositor español, popular haber sido teclista, vocalista y compositor principal del grupo de rock andaluz Triana. Era el menor de ocho hermanos de una familia trabajadora, dedicándose desde muy joven a los oficios de platero y mecánico. En su tiempo libre, hacía algunas actuaciones como cantante; incluso llegó a sustituir a su hermano Manuel en el grupo donde trabajaba, la Orquesta Macarena. En los años sesenta, fundó el grupo Los Nuevos Tiempos, que hacía rock con letras en inglés. Aunque no tuvieron mucha repercusión, grabaron varias canciones como ‘Cansado me encontré’, la única en castellano.

Viajó a Madrid, donde entró en contacto con diferentes grupos. Intentó hacerse un hueco en el grupo de pop Los Bravos que imitaba en español la fórmula de Los Beatles, pero fue rechazado por su inevitable acento andaluz. En 1972, trabajó como teclista sustituto en Flor y Nata, uno de los grupos de moda de la época. Con ellos recorrió buena parte de la geografía hasta su regreso a Sevilla. Allí entró en Tabaca, constituida por Carlos Attias, bajista de Miguel Ríos; Emilio Souto, cantante de Los Solitarios, y Eduardo Rodríguez, que venía del grupo Los Payos. Tras el abandono del proyecto de Attias, se incorporó como bajista De la Rosa. El grupo fue agonizando hasta su disolución en 1974.

A mediados de los setenta, fundó el grupo Triana junto a Rodríguez y Juan José Palacios, ‘Tele’. En sus inicios, Jesús tenía compuestas algunas canciones que no daban un estilo definido a la formación. El único punto en común era la voz, con reminiscencias de Gary Brooker de Procol Harum y Steve Winwood de Traffic. Gracias a la unión de los tres intérpretes con los productores musicales Teddy Bautista y Gonzalo García Pelayo, se forjó su sonido característico, que fue catalogado como ‘rock andaluz’. Su primer disco, ‘El patio’, materializó ese nuevo movimiento musical. Continuaron grabando trabajos como ‘Hiojos del agobio’ y ‘Sombra y luz’, con los que recorrieron toda España. Sus canciones adquirieron un rotundo peso lírico, con un virtuosismo instrumental que marcó su música como el mejor rock progresivo de la Transición.

Sus siguientes elepés supusieron un cambio drástico de los principios musicales del grupo, lo que provocó la incomprensión de sus seguidores. Grabaron canciones más comerciales, más cercanas al pop, bastante alejadas del sonido magnético de la primera época. Su último disco, ‘Llegó el día’, fue un compromiso de Jesús para volver a las raíces de Triana. Las letras vinieron cargadas de misterio, casi premonitorias, por el desenlace que estaba por llegar.

Tras cantar en un festival benéfico en San Sebastián, de regreso a su casa de Villaviciosa de Odón, sufrió un accidente de tráfico. Entró por su propio pie en el hospital, pero falleció poco después en el quirófano, a causa de las heridas. Fue enterrado en el cementerio del municipio madrileño, lugar donde, años después, sería también sepultado Tele.

En detalle:
· Sin ningún tipo de apoyo ni campañas de publicidad, demostraron sus capacidades y conseguieron ganar importancia en el mundo de la música.

· Para Miguel Ríos, "Jesús tenía un talento increíble para entender la vida; fue el fundamento de lo que hoy se llama rock-fusión".

· Su voz sonó por última vez en el estadio de Anoeta cantando 'Abre la puerta', uno de los grandes éxitos de la banda sevillana.

· El sonido de 'La leyenda del tiempo' de Camarón se debe principalmente a las melodías y recursos instrumentales de Triana.

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