Proyecto Atalaya

El Tío de la Tiza

Cádiz, 1861 – Sevilla, 1912

Los duros antiguos

Nacido en la gaditana calle Rosario Pineda, ha pasado a la historia del Carnaval de Cádiz por su apodo, El Tío de la Tiza, y por su celebérrimo tango ‘Los duros antiguos’. Su apodo le viene por la costumbre que tenía de apuntar sus consumiciones a tiza en las mesas de madera de la tienda La Lonja de Cádiz. De padre gaditano y madre valenciana, fue bautizado en la parroquia de San Lorenzo. Alternó su dedicación al Carnaval con sus ocupaciones laborales, que fueron diversas hasta llegar a la Sociedad Cooperativa Gaditana de Fabricación de Gas, a finales del siglo XIX. Posteriormente, se trasladó a otra empresa del mismo gremio: la Sociedad Catalana de Fabricación de Gas.

Tenía multitud de inquietudes literarias y por las artes escénicas, siendo presidente y frecuente contertulio en el Círculo Modernista. También fue alguien dotado para la música, que acostumbraba a componer con filas de botellas llenas de líquido a distinto nivel, de las cuales extraía las notas y que luego transcribía al pentagrama. Formó parte de la Banda del Regimiento de Artillería de Cádiz, en la que tocaba el clarinete con gran maestría. También se manejaba con soltura al toque de la guitarra.

A Antonio se le atribuye la incursión de los instrumentos de cuerda en los coros carnavaleros. Hay controversia en distintas afirmaciones sobre sus aportaciones al mundo de don Carnal, como la de si fue pionero en subir los coros a las carrozas durante las fiestas de calle, por los antecedentes históricos anteriores, así como la de que, desde la creación de su agrupación ‘Los Claveles’ en 1896, el tipo (el disfraz) guarde relación con el nombre de la misma. Sí que fue el primero en adornar las carrozas de los coros con bombillas eléctricas, haciéndolo por primera vez con la comparsa ‘Los Gallos’ en 1901. También fue precursor en hacer grabaciones sonoras de las coplas, como hiciera con sus tangos en cilindros de cera y en discos de pizarra.

Sus agrupaciones fueron contratadas para los más famosos cafés cantantes de Sevilla. También actuó en la Gran Peña de Barcelona y en el Salón Actualidades de Madrid, además del Teatro Circo Gaditano, Teatro Eslava, Teatro Cómico y el Liceo Albarrán. Tras trasladarse a Sevilla con su segunda mujer, en 1905, decidió sacar allí sus comparsas. Sus letras y melodías fueron interpretadas en zarzuelas y distintas obras teatrales como ‘La Estrella’ o ‘Los niños llorones’. Grandes músicos como José Cubiles, pianista de Manuel de Falla, cerraban los conciertos con sus tangos.

A título póstumo, recibió numerosos reconocimientos, tales como el Antifaz de Oro, máximo galardón de los Carnavales de Cádiz. El Ayuntamiento de la ciudad rotuló una plaza en su nombre en el popular barrio de la Viña y, en 2014, quedó inaugurado, en la playa de la Victoria, un busto como recuerdo y homenaje a ‘Los duros antiguos’. Junto a él, un pico y una caja con tapa de cristal, donde se ven los duros entre la arena de la playa.

En detalle:
· Su aportación fundamental al Carnaval fue la codificación del tango, además de hacer evolucionar la antigua comparsa de carnaval.

· Entre 1885 y 1911, llevó a las tablas del Teatro Falla más de veinte agrupaciones a concurso.

· En 1997, el conocido coro de Julio Pardo le homenajeó llevando a concurso la agrupación titulada 'El Tío de la Tiza', que obtuvo el segundo premio de su modalidad aquel año.

· Actualmente, se ha descubierto que algunas de sus obras se encuentran registradas por otros autores, por lo que se están investigando posibles fraudes de ley.

Newsletter

He leído y acepto el Aviso legal